PRESENTACIÓN

Este blog esta diseñado con la intención de difundir información academica de nivel universitario, el cual esta enfocado a la materia de TÉCNICAS DE LA ENTREVISTA II impartida en la UNIVERSIDAD LA CONCORDIA, por el profesor Gustavo Ornelas, dentro de la carrera de Psicología Clínica Humanista.



El presente material es un estracto de diferentes capitulos del libro ESTRATEGIAS DE ENTREVISTA PARA TERAPEUTAS de Willian H. Cormier, L. Sherlyn Cormier, con la finalidad de dar evidencias de aprendizaje.


febrero 04, 2010

Evaluación del Proceso Terapéutico.

Los datos recogidos en la evaluación de los resultados terapéuticos pueden tener valor práctico para el terapeuta y para el cliente. Los datos de evaluación sirven como medida de feedback para confirmar o redefinir el área de conflicto que ha sido seleccionada y las metas establecidas.


La evaluación del proceso ayuda al terapeuta a contestar a la pregunta: ¿Qué ha sucedido o que ha hecho para ayudar al cliente a que consiga los resultados deseados? Responder a esta pregunta, aunque sea de modo especulativo, puede ayudar al terapeuta a programar los casos futuros y determinar qué factores importantes pueden reproducirse en futuras sesiones terapéuticas y como lo va a hacer.

Cuando Medir: Tiempo de Medición.

A lo largo del proceso terapéutico, existen muchos momentos en los que el cliente y el terapeuta pueden examinarlo. Normalmente, es importante evaluar la ejecución del cliente antes de la terapia (línea base), durante la terapia o durante la aplicación de una estrategia terapéutica, inmediatamente después de la terapia y durante el seguimiento.

Evaluación de Línea Base. (Pre-tratamiento)

La evaluación de la línea base mide las conductas meta que existen en el cliente antes del tratamiento. El periodo de línea base es un punto de referencia con el que se comparará el cambio terapéutico de la conducta meta durante y después del tratamiento.

Recopilación de datos mediante la entrevista, la auto-observación y las autovaloraciones durante la línea base. Normalmente durante el periodo de línea base, se pide al cliente que observe los momentos en que aparece el problema y las conductas meta. En este momento se deben aplicar todos los consejos descritos para auto-observación. Las conductas que deben observarse se especifican con claridad y el cliente debería ensayar el proceso de auto-observación y registró. Generalmente el terapeuta tendrá la responsabilidad de convertir en gráficos los registros del cliente.

La disposición gráfica de los datos de auto-observación es muy importante durante la evaluación. El gráfico de la línea base puede compararse con los gráficos de datos recogidos posteriormente para ver si existen pruebas de que se haya producido alguna modificación en la conducta observada. Un gráfico también puede ser útil para proporcionar información sobre la relativa estabilidad o inestabilidad que se observa en la conducta.

Recopilación de datos mediante el role-play, la capacidad imaginativa y las medidas fisiológicas durante la línea base. El terapeuta puede desear obtener otra medidas corroborativas de los procesos terapéuticos del cliente, además de entrevistas, los auto-observaciones o las autovaloraciones.

Debe usarse un cuestionario de registro o uno de valoración para cada sesión durante el role-play. Por ejemplo, 0 = no muestra ninguna de las conductas deseadas asociadas a la petición de citas a mujeres, 10 (o más) = muestra todas las conductas meta.

Los datos podrían resumirse en un gráfico. Suponiendo que el cuestionario del registro para el role-play varía entre 0 y 10.

Recopilación de datos mediante los inventarios de auto informe durante el periodo de línea base. El terapeuta también puede proporcionar al cliente un inventario de auto informe durante el periodo de línea base.

No siempre es necesario representar gráficamente todos los datos de la línea base. El terapeuta puede guardar un registro sencillo de los datos de la auto observación, los cuestionarios de role-play y las puntuaciones obtenidas en los diferentes inventarios de auto informe.



Evaluación durante las Estrategias de Tratamiento.

Cualquier evaluador debe observar las operaciones que se están produciendo. En la terapia el terapeuta y el cliente observan los efectos del tratamiento asignado para lograr las conductas meta después de recoger los datos de línea base y de seleccionar la estrategia de tratamiento terapéutico.

Efectos de las medidas de tratamiento. Las medidas que se adquieren sobre los efectos del tratamiento en la conducta meta pueden disponer del mismo grado de estabilidad o inestabilidad como las medidas de la línea base.

Tratamiento sin línea base. Algunos problemas que presentan los clientes son tan intensos que inmediatamente debe aplicarse un tratamiento o estrategia terapeuta sin antes haber trazado la línea base de la conducta meta. En tales casos, se puede pedir al cliente que se observe durante el tratamiento y pueden aplicarse algunos inventarios o role-play. Por ejemplo, se pide a un cliente depresivo que registre el número de pensamientos depresivos que tiene al día mientras que el terapeuta aplica el tratamiento y el cliente pone en práctica el procedimiento.

Postratamiento: Evaluación después de la terapia.

Al finalizar la aplicación de una estrategia de tratamiento o al finalizar la terapia, el terapeuta y el cliente deberían evaluar de qué modo y en qué proporción la terapia ha ayudado al cliente a lograr los resultados deseados. Concretamente los datos recogidos durante la evaluación Postratamiento se emplean para comparar la aplicación y nivel de la conducta meta después del tratamiento con los datos recogidos durante el periodo de línea base (antes de la terapia) y durante el tratamiento.

Evaluación de Seguimiento.

Una vez que la relación terapéutica ha finalizado, debería realizarse cualquier tipo de evaluación de seguimiento. El terapeuta puede programar un seguimiento a largo plazo y/o a corto plazo. Un seguimiento a corto plazo es aquel que se practica entre tres y seis meses después de la terapia.

COMO MEDIR: MÉTODOS DE MEDICIÓN


Existen como mínimo siete métodos para que el terapeuta y el cliente puedan medir el progreso hacia los resultados deseados: las entrevistas, la auto-observación, las autovaloraciones, los inventarios de auto informe, el role-play, la capacidad imaginativa y las medidas patológicas. Cualquiera de estos siete métodos o su combinación puede usarse para comprobar si se van siguiendo las metas deseadas.


 Entrevistas.

La entrevista es un instrumento útil para recoger información sobre los problemas de los clientes y para definir metas de estos. Le entrevista puede utilizarse para evaluar informalmente el grado en que se van logrando las conductas meta. La segunda forma de aplicar la entrevista para recopilar datos consiste en grabar al azar determinadas entrevistas al principio, en la fase media y hacia el final de proceso.

 Autovaloraciones.


Las autovaloraciones se emplean para evaluar la magnitud o intensidad del estado subjetivo del cliente. Las escalas de valoración pueden establecerse con diversas graduaciones por ejemplo, 1-5, 0-100. Sherman y Cormier (1972) han aplicado la escala de Unidades Subjetivas de Irritación (USI) con una puntuación de 0 a 100 para autovaloraciones de las interacciones interpersonales con profesores, estudiantes y miembros de la familia.

 Inventarios de Autoinforme.


Los inventarios de auto informe pueden centrarse en los informes del cliente de cualquier conducta manifiesta particular, en la ansiedad o en las percepciones del medio. Los inventarios varían desde un enfoque global por ejemplo el MMPI, el SCL-90, Cuestionario de Síntomas hasta aquellos con un enfoque más especifico como el RAS, Escala de Asertividad.

 Role-Play.


El rol-play puede ser un instrumento útil para evaluar la conducta del cliente. El procedimiento consiste en escenas diseñadas por el terapeuta para provocar la aparición de conductas y evaluar la ejecución del cliente de las conductas meta.

Las autovaloraciones y los cuestionarios pueden usarse para evaluar la conducta del cliente durante el rol-play. Estas autovaloraciones o cuestionarios deberían especificar las principales dimensiones de respuesta de cada resultado esperado o conducta meta.

 Capacidad Imaginativa.


La capacidad imaginativa para evaluar la percepción del cliente de las situaciones problemáticas antes, durante y después del tratamiento. Se pide a los clientes que se relajen, cierren sus ojos, que imaginen la situación problemática o el hecho problemático mediante instrucciones detalladas y se concentren en tantas sensaciones asociadas a la situación problemática particular como le sea posible. El propósito de centrarse en las sensaciones es aumentar la conciencia del cliente o el realismo de la situación para recordar los detalles específicos asociados al problema.

 Medidas Fisiológicas.


Otra forma de evaluar los resultados consiste en medir directamente las respuestas psicofisiológicas del cliente. Barlow at col. (1984) señalaron que las medidas psicofisiológicas se han empleado preferentemente para evaluar los resultados de tres tipos de trastornos: 1) ansiedad o conducta fóbica (ritmo cardiaco, pulso y conductividad de la piel), 2) trastornos psicofisológicos (presión sanguínea, dolores de cabeza migrañosos) y 3) trastornos sexuales (activación genital de hombres y mujeres).

QUÉ MEDIR: DIMENSIONES DE RESPUESTA.


El terapeuta y el cliente pueden evaluar una o varias metas o conductas de interés dependiendo del número de cambios que han acordado durante el proceso de definir metas, es recomendable que por cada cliente se realicen múltiples mediciones de cada conducta meta.


Las cinco dimensiones más utilizadas para medir la dirección y el nivel de cambio de las conductas son la frecuencia, duración, la latencia, la intensidad y la ocurrencia.

• Frecuencia.


La frecuencia refleja el numero de conductas a manifiestas o encubiertas y se determinan metiendo la conducta cada vez que surge. La frecuencia se emplea normalmente cuando la conducta es discreta y d época duración.

• Duración.

La duración refleja la duración del tiempo en la que se mantiene una respuesta o una serie de respuestas.

• Latencia.

La latencia es la cantidad de tiempo que transcurre antes de aparecer la respuesta o la conducta. El número de minutos antes de dormir es un ejemplo de repuesta de latencia.

• Intensidad.

La intensidad o grado de una conducta puede evaluarse mediante una escala de valoración. Por ejemplo, la intensidad de los sentimientos de ansiedad puede medirse con puntuaciones desde 1 (no ansioso) hasta 5 (pánico). En primer lugar el terapeuta debe estar seguro de lo que se va a valorar está bien definido y especificado en el lenguaje del cliente. En segundo lugar, las escalas de valoración deberían de diseñarse para que incluyan una descripción de cada punto de la escala. En tercer lugar las escalas de valoración deberían ser unidireccionales empezando por 0 ó 1. No deberían incluir puntos negativos.

• Ocurrencia.

La ocurrencia se refiere a la presencia o ausencia de las conductas de interés. Se pueden utilizar cuestionarios para registrar la ocurrencia de determinadas conductas, estos son semejantes a las escalas de valoración.

EVALUACION DE LOS RESULTADOS DE LA TERAPIA

El problema del cliente debe definirse claramente y las conductas meta deben especificarse antes de que el terapeuta ejecute la evaluación. En algunas ocasiones el problema del cliente o las metas pueden definirse y cambiarse. En tales casos, el método de evaluación.




La conducta meta y las dimensiones de respuesta deberán modificarse para que reflejen la redefinición del problema.


El terapeuta es responsable de preparar los procedimientos de evaluación y explicárselos al cliente, quien debe actuar como participante activo del proceso de recogida de datos.

EVALUACION DE PROCESOS Y RESULTADOS TERAPEUTICOS

Los resultados tangibles constituyen la espina dorsal del proceso de esfuerzo en la terapia. Para que el cliente se anime y siga adelante, necesita ver resultados. Por lo tanto, el cliente y el terapeuta deberían ser capaces de evaluar si el programa de acción está siendo aplicado o no y hasta qué grado, y los resultados de esta aplicación.


Los datos recogidos durante la evaluación se emplean para tomar decisiones sobre la selección de estrategias de tratamiento y sobre la proporción en que se logran las metas de un cliente.

OBJETIVOS:

1) Dada la descripción del caso de un cliente y la descripción de los procedimientos de evaluación identificar.

a. Dimensiones de las respuestas empleadas con este cliente.

b. Métodos de medición empleados.

c. Tiempo de medición.

2) Dados los ejemplos de datos de auto-observación recogidos durante los periodos de línea base, tratamiento y pos tratamiento, realizar los gráficos e identificar las tendencias de los gráficos.

3) Practicar la evaluación de un resultado real o hipotético, especificando las dimensiones de la respuesta, los métodos y los tipos de medida.

DEFINICION Y PROPOSITO AL EVALUAR LA TERAPIA.

Existen dos razones para evaluar la terapia. La razón principal consiste en evaluar los resultados terapéuticos. Un segundo propósito es evaluar el proceso terapéutico.

FACTORES AJENOS AL TRATAMIENTO:

Los factores ajenos al tratamiento más importantes son: La influencia terapéutica y la relación terapéutica, las características de la demanda, las instrucciones y las expectativas y la posible reactividad de la medida.

INFLUENCIA DEL TERAPEUTA Y DE LA RELACION

Los cambios terapéuticos del cliente pueden ser el resultado de “aspectos no específicos como la atención, la sugestión y la fe que son comunes en la mayoría de las situaciones interpersonales.

CARACTERISTICAS DE DEMANDA.

Las características de la demanda incluyen cualquier señal que influye sobre la percepción de una persona y de su función en un entorno particular. Otra característica de la demanda que puede influir sobre los resultados terapéuticos mediante la transmisión de ciertas “exigencias” son las instrucciones y las expectativas.

MUESTRA DE INSTRUCCIONES Y EXPECTATIVAS.

Los clientes que reciben instrucciones detalladas y específicas sobre el consejo y sobre una estrategia y tratamiento probablemente tenderán a emplearla con más exactitud y sus auto-informes tendrán menos sesgos.

Si el cliente concede credibilidad al terapeuta y al tratamiento, pueden aumentar sus esfuerzos por producir el cambio.

REACTIVIDAD DE LA MEDIDA.

La reactividad puede definirse como los cambios de conducta que se producen a consecuencia de la observación y registro de la conducta, a pesar o además de los tratamientos de intervención. Las técnicas de medición mediante la auto-observación se asocian con grandes cantidades de reactividad. Al evaluar el cambio el terapeuta debería ser consciente de las posibles propiedades reactivas de las medidas que emplea para hacerlo.

febrero 01, 2010

Guías para identificar el nivel de cambio



Propósito: esperar alguna indicación de los niveles presentes o futuros de la conducta deseada.


Nivel como indicador del tipo de problema y de meta: el nivel reflejado en la meta deseada refleja tanto el tipo de problema como el tipo de meta.

Cuando el cliente desea eliminar algo, quiere sustituir lo que se elimina con otra conducta que considera mas apropiada.

El nivel de una meta refleja el mantenimiento de una respuesta especifica observable o encubierta con un nivel de frecuencia medio o bajo las condiciones existentes. No todas las metas reflejan una discrepancia entre la conducta presente y la futura. Algunas metas pueden ir dirigidas a mantener una situación o respuesta satisfactoria. Una meta de mantenimiento sugiere que el nivel de conducta presente del cliente es satisfactorio y suficiente, por lo menos en este momento. Una meta de mantenimiento refleja las áreas de la vida del cliente que funcionan bien y son necesarias cuando se ha conseguido una meta de cambio.

Conocer la dirección y el nivel de cambio definido en las meyas del cliente es necesario para seleccionar las estrategias terapéuticas. Es importante que el terapeuta y el cliente dediquen suficiente tiempo para especificar el nivel deseado de la meta, incluso cuando este proceso parezca difícil o costoso.

Guías de una entrevista para definir metas.

La mayoría de los clientes seleccionarán más de una meta. Puede ser más realista que el cliente trabaje para lograr una variedad de objetivos específicos en vez de un único resultado. La selección de una meta también puede implicar la existencia de otras.


Adoptar multitud de metas a la vez puede ser poco realista. El terapeuta debería pedir al cliente que escoja una de las metas para empezar. Tras seleccionar una meta inicial con la que se va a trabajar, el terapeuta y el cliente pueden definir los tres apartados de la meta e identificar las submetas.



Definición de conductas relacionadas con las metas: para logara cualquier meta, el terapeuta debe actuar. Y para asegurar que la meta por que se trabaja es funcional y real, el terapeuta debe iniciar su secuencia de actividad definiendo la meta. Definir metas implica especificar en términos operativos y conductuales lo que va ha hacer el cliente como resultado de la terapia. Definir conductualmente las metas especifica el proceso de establecimiento de metas y las metas específicamente definidas tienden a crear más incentivos y guías de ejecución que las intenciones vagamente formuladas.





Guías de entrevista para definir las conductas meta



Propósito: que el cliente haya definido las conductas manifiestas y encubiertas asociadas con la meta.

Es importante que los clientes especifiquen lo que quieren hacer en vez de lo que no quieren o quieren dejar de hacer. Una meta esta suficientemente definida cuando el terapeuta puede repetir y parafrasear la definición del cliente.



Definir las condiciones de una meta:

El segundo apartado de una meta especifica las condiciones, es decir, el contexto o circunstancias en las que se producirá dicha conducta. Al especificar las condiciones de una conducta se establecen los límites y las ayudas para asegurar que la conducta surgirá solo en los entornos deseados o con las personas deseadas y que no se generalizara a todos los ambientes si no es este el propósito.

Principales impedimentos de un terapeuta



1º Propios conflictos no resueltos en el área que el cliente trata de conseguir pueden bloquear la terapia.


2º Incompatibilidad entre sus propios valores y los que se reflejan en la selección de metas que ha realizado el cliente.

3º Sentir que la terapia no va a hacer útil cuando las condiciones que contribuyen en el problema se escapan del control del cliente o cuando el cliente no desea cambiar estos factores.



Adoptar la decisión:

Si el cliente ha seleccionado las metas y ni usted ni él muestran ninguna reserva, decidirá seguir con la terapia y asistir al cliente en la consecución de esta meta. Suponiendo que el cliente lo confirme, el terapeuta y el cliente pasaran a definir la meta.

Usted puede decidir continuar con el cliente en base a renegociar más metas seleccionadas por el cliente.

La reevaluación de la meta del cliente es un aspecto bastante complejo. Al iniciar una reevaluación o redefinición de las metas del cliente. El terapeuta debería aclarar esta vía el cliente y también informarle que tales comentarios se basan en la información y en el sistema de pensamiento propio del terapeuta. La reevaluación de las metas del cliente debería hacerse solo con el conocimiento y consentimiento de este, quien es libre para negarse a cumplir las sugerencias de terapeuta. La influencia del terapeuta al reconsiderar las metas debería ser explicita, no implícita, abierta mas que disimulada.

La derivación puede ser apropiada cuando:

*El cliente desea lograr una meta que es incompatible con su sistema de valores

*Usted no es capaz de ser objetivo con respecto al problema del cliente

*Usted carece de experiencia o desconoce el tratamiento solicitado por el cliente

*Usted sobrepasa su nivel de competencia al trabajar con el cliente

*Esta implicada más de una persona y debido a sus emociones o sesgos, usted se posicionaría a favor de una de ellas.

Cuando el terapeuta decide practicar la terapia con el cliente, sume un grado de lealtad y responsabilidad por los resultados de la terapia.

Los terapeutas también son responsables de proporcionar a los clientes diferentes posibilidades de terapeutas a los que puede ser derivado y que son competentes y cuya fama no es mala ni hace referencia a experiencias poco éticas.

Guías de entrevista que evalúan la factibilidad



Propósito: hacer que el cliente evalué de forma realista el grado de posibilidad de alcanzar una meta en un espacio de tiempo razonable.



Ventajas y desventajas de las metas:

Es importante examinar el efecto del beneficio/coste de todas las metas identificadas, es decir, lo que se da (coste) frente a lo que se obtiene (beneficio) al alcanzar una meta. Es probable que los clientes no se comprometan a dejen de trabajar por una meta cuando las exigencias son excesivas y las recompensas demasiado bajas. La evaluación de las ventajas y desventajas permite al cliente anticipar el precio de una meta y después decidir si el cambio merece el coste que implica para sí mismo o para las personas significativas. Los costes son menos obvios que los beneficios del cambio. Si el terapeuta y el cliente no evalúan los posibles costes, el cliente puede alcanzar la meta y resolver el problema original pero crear nuevos problemas durante el proceso.

Las ventajas y desventajas de cualquier meta particular deben ser emocionales, cognitivas y conductuales, la consecución de una meta puede producir sentimientos y estados de ánimo deseables e indeseables, pensamientos, imágenes y dialogo interno de auto-refuerzo o autodesprecio y reacciones o respuestas motoras apropiadas o inapropiadas.

Las ventajas y las desventajas pueden ser a largo o corto plazo.



Guías de entrevista para las ventajas

Examinar con todos los clientes las consecuencias positivas del cambio por cuatro razones:

*Determinar si las ventajas que percibe el cliente son indicativas de beneficio reales.

*Subrayar otras posibles ventajas para el cliente o para otros que se hayan pasado por alto.

*Fortalecer el deseo de cambio del cliente

*Determinar el grado de relevancia de la meta identificada, dado el grado de funcionamiento general del cliente.

Propósito: obtener alguna señal de que el cliente selecciona una meta en base a las consecuencias positivas que esa meta puede producir.

Si el cliente no es capaz de identificar por sí mismo ningún beneficio del cambio, esto puede observarse como una señal de precaución, pues puede indicar que el cliente trata de cambiar porque alguien se la ha pedido o que la meta identificada no es muy relevante. Teniendo en cuenta la imagen total.




Guías de entrevistas para las desventajas

Propósito: buscar alguna identificación de que el cliente esta considerando todos los posibles costes asociados a la meta.

Si el cliente no identifica ningún riesgo el terapeuta puede utilizar la confrontación para señalar algunas desventajas, pero el terapeuta deberá tener cuidado para no persuadir al cliente a adoptar otra alternativa solo por que el crea que es mejor.

Momento de la decisión:

El proceso de elaboración de metas hasta este punto ha implicado al cliente como principal agente para escoger las metas. El rol del terapeuta ha sido secundario, limitado a ayudar al cliente a examinar la factibilidad, los riesgos y las desventajas del cambio. En este punto el proceso, la función del terapeuta es decidir si puede o no puede ayudar al cliente a conseguir las metas que ha seleccionado.

El terapeuta y el cliente deberán decidir si continúan con la terapia y tratan de conseguir las metas.

Guías de entrevista para determinar a quién corresponde el cambio




Propósito: que el cliente identifique una meta que representa una elección o cambio del cliente y no de otros salvo que estos se hallen directamente afectados.

Meta realista: es la factible, la que pertenece al ámbito de control y capacidad del cliente; implican resultados basados más en expectativas realistas que en ideas modelos o autodemandas irreales, irracionales o perfeccionista.

Cuando los clientes seleccionan las metas, el terapeuta debe cuidar que estas metas no sean irreales, por que son excesivamente elevadas para poder alcanzarlas o por que son demasiado bajas o su logro no es consistente con el curso natural de los acontecimientos.

Los clientes que establecen metas excesivamente elevadas funcionan normalmente en base a modelos perfeccionistas y autodemandas y con frecuencias también temen al fracaso, también es una forma de evitar riesgos o de no intentar.

Los clientes que se imponen matas poco consecuentes o excesivamente bajas normalmente también temen al fracaso y seleccionan estas metas porque sabes que si las podrán lograr, pero los resultados son tan inconsistentes como la misma meta y a menudo su obtención no conduce a ninguna gratificación.

El terapeuta puede ayudar a los clientes a examinar el grado de realismo de las metas identificadas, si están basadas en modelos de cambios posibles y racionales y si en la elección de mestas irreales se refleja ansiedad del cliente.

GUÍAS DE ENTREVISTA PARA LA SELECCIÓN DE METAS


Propósitos de las metas


Proporcionar al cliente una explicación sobre la función de las metas, describir las metas, la importancia de su definición y de la participación del cliente en el proceso de elaboración de las mismas.


Identificar las metas del cliente

Meta final:

*Implica lo que el cliente desea que suceda como resultado del proceso terapéutico.

*Son la profundización de los problemas que experimenta el cliente.

*Implican dos clasificaciones fundamentales de los problemas: elección y cambio.

*Consiste en un cambio que el cliente quiera realizar, que pueden referirse a los conductas o situaciones abiertas, a conductas encubiertas o a combinaciones de ambas.

*Pueden dirigirse a eliminar algo, aumentar algo, desarrollar algo o reestructurar algo pero en todos los casos se espera que el cambio produzca una mejoría sobre lo que existe.




Guías de entrevista para identificar las metas del cliente

Propósito: ayudar al cliente a identificar los resultados terapéuticos que desea.

El terapeuta puede asistir al cliente en la selección de metas de muchos modos: asignándole tarea para casa, empleando la capacidad imaginativa, mediante preguntas adicionales o mediante inventarios o cuestionarios de autoinforme.



Correspondencia de meta:

El cliente proyecta la culpa o responsabilidad de su problema en alguna otra persona, del mismo modo, al expresar metas, en un principio desean seleccionar metas que implican cambios en otras personas y no en ellos mismos.

El cliente es la persona identificada que solicita ayuda y servicios y es la única persona que puede cambiar.

La persona a quien corresponde el cambio normalmente esta directamente relacionada con el grado de control o responsabilidad que tiene el cliente e la situación y con la elección o el cambio.

SELECCIÓN Y DEFINICIÓN DE METAS


Selección:

1º Explicar el propósito de las metas

2º Pedir al cliente que especifique los cambios positivos deseados por efecto de la terapia

3º Determinar si la meta seleccionada implica cambios en el cliente

4º Examinar si las metas son realistas

5º Identificar las posibles ventajas derivadas de la consecución de la meta

6º Identificar las posibles desventajas derivadas de la consecución de la meta

7º Adoptar una decisión.



Definición:

1º Definir las conductas manifiestas y encubiertas asociadas con la meta

2º Determinar las circunstancias o condiciones de cambio

3º Establecer el nivel de la conducta meta o la proporción en que debe aparecer

4º Secuenciar las fases temporalmente y según el grado de dificultad

5º Identificar los obstáculos que dificultan la consecución de las metas

6º Identificar los recursos necesarios

7º Revisar el progreso



El terapeuta puede facilitar la elaboración de las metas terapéuticas empleando diversas guías en la entrevista que van dirigidas a la selección y definición de las metas.

Krumboltz sugería dos líneas básicas para el proceso de establecimiento de metas:

1º La meta debería ser expresada por cada cliente individualmente

2º La meta debe expresarse en términos de resultados operativos

Esto garantiza que el proceso de elaboración de objetivos sea individualizado y que las metas sean observables.

SELECCIONAR Y DEFINIR LOS RESULTADOS DESEADOS


PROPÓSITOS DE LAS METAS

Las metas representan los resultados u objetivos deseados y funcionan como etapas límites del progreso del cliente.

1º Proporcionan cierta dirección a la terapia, pues reflejan las áreas de interés para el cliente que requieren mayor atención inmediata; clarifican también las expectativas iníciales que tiene el cliente sobre la terapia.

Sin metas, la terapia puede crecer de dirección o puede basarse más en los sesgos o preferencias personales del terapeuta.

Las metas permiten a los terapeutas determinar si disponen de las destrezas, competencias e intereses suficientes para trabajar con un cliente particular y obtener un resultado determinado o si carecen de él.

2º Tiene un rol en la cognición humana y en la resolución de problemas.

3º Homogeniza las bases al seleccionar y aplicar ciertas estrategias o intervenciones terapéuticas, pues los cambios que desea el cliente determinaran, los tipos de planes de acción y estrategias de tratamiento que pueden introducir con bastante probabilidad de éxito.

4º El rol que desempeñan en la evaluación de los resultados terapéuticos. Teniendo en mente la meta definida, el terapeuta y el cliente pueden observar el progreso que se produce en direcciona la meta y comparar el progreso antes y después de una intervención terapéutica, estos datos proporcionan un feedback continuo para el terapeuta y para el cliente.

5º Los sistemas de programación de metas son útiles porque al igual que los procedimientos de evaluación son reactivos, es decir, los clientes progresan en los cambios como resultado del mismo progreso de programación.

¿Cuándo es “suficiente” una evaluación?



La evaluación es un proceso continuo a lo largo de la terapia porque los clientes son personas y de vez en cuando surgen y se definen los problemas.


Se requieren periodos de evaluación más breves cuando los clientes sufren una crisis o cuando los terapeutas están muy solicitados y un gran número de pacientes se hallan en lista de espera.

Evaluación de la auto-observación del cliente.

Cuando se emplea la auto observación como instrumento de evaluación de la persona se pide al cliente que registre por escrito sus observaciones.


Uno de los objetivos de la auto-observación es ayudar al terapeuta y al cliente a obtener información sobre lo que ocurre realmente con respecto al problema y a los entornos reales.



Registros descriptivos.

Se puede introducir un simple registro descriptivo para saber qué, donde y cuando sucede al cliente. El registro descriptivo es especialmente útil cuando el cliente encuentra problemas para identificar el problema o para seleccionar las situaciones problemáticas.



Registros conductuales.

Toda esta información puede registrarse en un registro conductual, que consiste simplemente en la prolongación de un registro descriptivo. También se pide al cliente que registre la duración y la frecuencia, en que aparece la conducta.



Uso de los registros.

El éxito de los registros puede depender de la motivación del cliente para hacerlo, así como de las instrucciones y entrenamiento. Cuatro consejos pueden aumentar la motivación del cliente para completar la auto-observación.

1) Explicar las razones del uso de los registros.

2) Proporcionar instrucciones específicas y detalladas sobre la forma de guardar el registro.

3) Adaptar el tipo de registro a la capacidad de auto-observación del cliente.

4) Adaptar el registro y las instrucciones al problema del cliente y al grado y tipo de patología, si existe.

ONCE CATEGORIAS PARA EVALUAR LOS PROBLEMAS DEL CLIENTE





1) Explicación del propósito de evaluación.

2) Identificación del tipo de problema.

3) Priorización y selección de los aspectos del problema.

4) Identificación de las conductas problemáticas presentes.

5) Identificación de los antecedentes.

6) Identificación de las consecuencias.

7) Identificación de los logros secundarios.

8) Identificación de las soluciones previas.

9) Identificación de las destrezas del manejo del cliente.

10) Identificación de las percepciones que tiene el cliente sobre el problema.

11) Identificación de la intensidad del problema.



En primer lugar es útil ofrecer al cliente alguna explicación teórica, la razón para efectuar una entrevista de evaluación antes de obtener la información. Seguidamente es necesario dedicar algún tiempo a ayudar al cliente a examinar todos los aspectos relevantes y priorizar, en orden de importancia, de molestia etc. Los problemas sobre los que se trabajara.

EXAMEN DEL ESTADO MENTAL


Si, después de la entrevista inicial usted tiene alguna duda sobre el estado psiquiátrico del cliente o sospecha la existencia de algún trastorno cerebral orgánico, puede ser conveniente practicarle un examen sobre el estado mental.

El registro del historial (y el examen mental, si aplica) se realizan durante las primeras sesiones, después de tener ese tipo de información preliminar sobre el cliente, puede iniciar la entrevista de evaluación directa con el cliente para definir más específicamente los parámetros de los problemas y de los conflictos.

DEFINICION DE LOS PROBLEMAS DEL CLIENTE MEDIANTE UNA ENTREVISTA DE EVALUACION

La información histórica o del pasado del cliente. Normalmente se utiliza como uno de los apartados del proceso general de evaluación que puede ser válido para que el terapeuta inserte todas las piezas de puzle relativas a los problemas actuales del cliente y las dificultades frecuentes en su vida diaria.


El proceso de obtención de este tipo de información se denomina “recogida de historial”. Durante la recogida del historial pueden solicitarse diversos tipos de información pera las áreas mas importantes son:

1) Identificación del cliente.

2) Aspecto general y atuendo.

3) Historial relacionado con el (los) problema (s) presentes.

4) Historial psiquiátrico y/o terapéutico.

5) Historial académico y profesional.

6) Historial médico y sanitario.

7) Historial evolutivo social (incluyendo los antecedentes religiosos y culturales, la afiliaciones, los valores predominantes, la descripción de los problemas pasados, los acontecimientos cronológicos / evolutivos, los antecedentes militares, las actividades sociales / ocio y la situación social actual).

8) Historial familiar, marital, sexual.

9) Evaluación de los patrones comunicativos del cliente.

10) Resultados del estado mental; resumen diagnostico.



El orden que se sigue para recoger información durante la entrevista inicial es también un factor importante. Normalmente el entrevistador empieza con los temas menos conflictivos y deja los más sensibles (como el #6, #7 y #8) para el final de la sesión cuando se haya establecido un grado mayor de rapport y el cliente se sienta más cómodo para revelar información personal.